jueves, 23 de febrero de 2012

Hijo de la Sombra


Desterrado del cielo y arrancado del infierno,
enamorado en ataúdes de mentiras y engaños,
mientras beso a beso va muriendo lo eterno,
mientras lágrima a lágrima escapan los años.
Arropado por el abrazo del beso homicida,
en la sutil danza en el jardín de la bruma.
Perdido y encontrado en océanos de vida,
balanceándome en la noche cual pluma.
Sexo y lujurias con pasiones e injurias,
mezclados con el néctar de los muertos,
conforman el etéreo flujo de memorias,
vagando por el frio hielo de los desiertos.

Ven, dama que suplicas por el placer,
acurrúcate en la lascivia de mis alas.
Saborea la dulce sangre de mi querer,
muerte y noche serán para ti atadas.

Fúnebre melodía para una canción de cuna,
escucha los versos plasmados en esta hoja.
Consulta a la noche y suplica a la luna,
que entre muerte y vida tu alma escoja.

1 comentario:

  1. Tiendo a ser una persona a la que no le gusta mucho la poesía, pero está vez he de decir que me ha gustado. Me gusta como te expresas y como transmites con unas simples palabras. Espero tu próxima entrada. Un beso! :)

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